Chi fa da sé - Marco Masini
Bambino mio che stai per diventare un uomo,
mi dissero gli zii: presto ci rivedremo,
è come un collegio, si mangia bene e poi
appena guarisci ritornerai con noi.
E son guarito sì, gli anni ti fanno forte
finché il custode aprì quelle pesanti porte
da solo, di marmo, la testa dura che
spaccava gli inverni che avevo dentro me.
Chi fa da sé non sbaglia mai
e a spese mie io diventai
cattivo e forte come un re
perché la vita è sempre lotta e sempre notte c'è
e sempre notte c'è
c'è nel cuore stretto di chi fa da sé,
nel cuore stretto di uno come me.
Quando credevo ormai di avere vinto tutto
con gli occhi tu mi fai scoprire il cuore in petto
ed esce la vita, le nuvole e i colori
da questa ferita d'amore dentro me.
Chi fa da sé lontano va,
non ha paura né pietà,
chi fa da sé diventa un dio,
ma senza di te non so nemmeno più chi sono io,
non so chi sono io che disperatamente perdo te
perché l'amore non si fa da sé.
Non so chi sono io che disperatamente perdo te
perché l'amore non si fa da sé.
Bambino mio che stai per diventare un uomo,
mi dissero gli zii: presto ci rivedremo,
è come un collegio, si mangia bene e poi
appena guarisci ritornerai con noi.
E son guarito sì, gli anni ti fanno forte
finché il custode aprì quelle pesanti porte
da solo, di marmo, la testa dura che
spaccava gli inverni che avevo dentro me.
Chi fa da sé non sbaglia mai
e a spese mie io diventai
cattivo e forte come un re
perché la vita è sempre lotta e sempre notte c'è
e sempre notte c'è
c'è nel cuore stretto di chi fa da sé,
nel cuore stretto di uno come me.
Quando credevo ormai di avere vinto tutto
con gli occhi tu mi fai scoprire il cuore in petto
ed esce la vita, le nuvole e i colori
da questa ferita d'amore dentro me.
Chi fa da sé lontano va,
non ha paura né pietà,
chi fa da sé diventa un dio,
ma senza di te non so nemmeno più chi sono io,
non so chi sono io che disperatamente perdo te
perché l'amore non si fa da sé.
Non so chi sono io che disperatamente perdo te
perché l'amore non si fa da sé.
Quien se vale por sí mismo - Marco Masini
Niño mío que te vas a hacer hombre,
me dijeron los tíos: pronto nos volveremos a ver,
es como un colegio, se come bien y después
nada más curarte volverás con nosotros.
Y me he curado sí, los años te hacen fuerte
hasta que el guardián abrió aquellas pesadas puertas
él solo, de mármol, la cabeza dura que
quebraba los inviernos que tenía dentro de mí.
Quien se vale por sí mismo no se equivoca nunca
y a costa mía me volví
malvado y fuerte como un rey
porque la vida es siempre lucha y siempre noche hay
y siempre noche hay
hay en el corazón encogido de quien se vale por sí mismo,
en el corazón encogido de uno como yo.
Cuando creía ya haberlo ganado/vencido todo
con los ojos tú me haces descubrir el corazón en el pecho
y sale la vida, las nubes y los colores
de esa herida de amor dentro de mí.
Quien se vale por sí mismo llega lejos,
no tiene miedo ni piedad,
quien se vale por sí mismo se convierte en un dios,
pero sin ti ni siquiera sé ya quién soy yo,
no sé quién soy yo que desesperadamente te pierdo
porque en el amor no se vale uno por sí mismo.
No sé quién soy yo que desesperadamente te pierdo
porque en el amor no se vale uno por sí mismo.
Niño mío que te vas a hacer hombre,
me dijeron los tíos: pronto nos volveremos a ver,
es como un colegio, se come bien y después
nada más curarte volverás con nosotros.
Y me he curado sí, los años te hacen fuerte
hasta que el guardián abrió aquellas pesadas puertas
él solo, de mármol, la cabeza dura que
quebraba los inviernos que tenía dentro de mí.
Quien se vale por sí mismo no se equivoca nunca
y a costa mía me volví
malvado y fuerte como un rey
porque la vida es siempre lucha y siempre noche hay
y siempre noche hay
hay en el corazón encogido de quien se vale por sí mismo,
en el corazón encogido de uno como yo.
Cuando creía ya haberlo ganado/vencido todo
con los ojos tú me haces descubrir el corazón en el pecho
y sale la vida, las nubes y los colores
de esa herida de amor dentro de mí.
Quien se vale por sí mismo llega lejos,
no tiene miedo ni piedad,
quien se vale por sí mismo se convierte en un dios,
pero sin ti ni siquiera sé ya quién soy yo,
no sé quién soy yo que desesperadamente te pierdo
porque en el amor no se vale uno por sí mismo.
No sé quién soy yo que desesperadamente te pierdo
porque en el amor no se vale uno por sí mismo.
0 comentarios:
Publicar un comentario